Crowdstrike: el fallo global que llevó a Windows al colapso | Jorge Zamo...

Los propios Estados Unidos de Norteamérica se han declarado públicamente incapaces de certificar sus propias elecciones; votar en la urnas, es simplemente legitimar por voluntad propia, a las autoproclamadas élites, mientras nosotros nos  autoproclamarnos, entonces; como sus criaturas.

La humanidad cayendo al abismo sin siquiera hacer nada. Además todo está censurado por las llamadas industrias tecnológicas, las cuales, dentro de poco, te podrá hacer sufrir o gozar a voluntad o, por lo menos en eso está invirtiendo Zuckerberg miles de millones de dólares (proyecto MK Ultra) con dinero de los contribuyentes.

Nos encaminamos a vivir sometidos a un mecanismo de recompensa perpetuo, con nuestros cerebros en las manos de Zuckerberg o cualquier otro patán como éste.