HÉROES DE LABORATORIO CREADOS POR LA INDUSTRIA DDEL ENTRETENIMIENTO
Cada vez más se escucha en las noticias como los políticos y dirigentes de nuestros estados, están comprometidos en estos negocios perversos, es más, entre ellos mismos se acusan mutuamente en público sin ningún pudor.
Resulta increíble, como la prensa en general esconde el hecho, de que, la propia CIA, los organismos de inteligencia civil y militar así commo la ONU, están comprometidos en ello; resulta inverosímil, que el actual presidente de los Estados Unidos de Norteamérica y su hijo, demócratas, así como el principal contendiente opositor republicano estén, ambos, involucrados en el episodio de la isla Epstein, junto con la mayoría de las grandes figuras de la farándula y la política internacional que alcanzan hasta la realeza británica.
Hoy por hoy, nuestros jóvenes admiran más a un adinerado delincuente que a cualquier persona honesta, producto de un lavado de cerebro por parte de la industria del entretenimiento. Lo triste de todo esto es observar como los mismos estados se encuentran a disposición directa de personajes como estos, los cuales se han convertido en los modelos a seguir de nuestros jóvenes.
Igualmente triste es seguir hablando de "libre competencia" cuando todo empresario honesto se ve obligado a competir con quienes se dedican a lavar activos o al tráfico de menores u órganos de menores, todo ello con la autorización y la complicidad de los órganos de inteligencia y hasta los cuerpos diplomáticos de los estados que se han visto envueltos en señores escándalos.
Quienes tenemos que salir al rescate de nuestra sociedad en contra del crimen organizado global somos nosotros, los ciudadanos comunes y corrientes, porque entre los nuevos políticos y empresarios "postmodernos" que se han adueñado de todo cuanto existe, discriminando - por privilegio - a todos los ciudadanos decentes, creativos y eficientes debemos perder las esperanzas - sólo el pueblo salva al pueblo -.
Podría afirmarse que, en poco tiempo, toda la mediana y pequeña empresa está destinada a desaparecer, dado que resulta imposible competir con aquellos cuyo negocio es simplemente un cartel y el negocio en sí mismo es simplemente una ganancia marginal; todo ello como prebenda otorgada por los propios estados.
De manera que, es de esperarse que los nuevos líderes de las naciones y los nuevos héroes del cine y la televisión sean en adelante los tratantes de infantes para trabajos sexuales y para tráfico de órganos.
Por tales motivos, hoy por hoy, podemos afirmar que la derecha - privatizada - navegando con bandera de izquierda progresista nos encamina a un régimen - comunista corporativo elitísta y criminal - desde la propia Casa Blanca, eliminando por completo la libertad de empresa por medio de privilegios a una nueva generación de empresarios coludidos con el crimen organizado con quienes resulta imposible competir, todo ello, al amparo de los propios poderes cohercitivos de los estados; premiando y haciendo héroes de los más mediocres - por selección artificial - .
En consecuencia, deberíamos exigir que las empresas coludidads como lo pueden ser Facebook, Google y demás tecnológicas, a la sombra de los mismos estados, se debiesen dedicar a censurar el fomento de este tipo de liderazgos perversos que ahora promocionan y que averguenzan a toda la especie humana; en lugar de dedicarse a censurar tanto escritores como a periodistas honestos, y reestablecer el orden en el mercado libre, así como aquellos intelectuales que son amordazados por simplemente evidenciar este tipo de negocios perversos que la propia prensa inclusive esconde con sus falsas apariencias.
Comentarios
Publicar un comentario