AHORA QUE EL SISTEMA SE ENCARGÓ DE EXTINGUIR A "LA ANTIGUA" INRTELECTUALIDAD NO ALINEADA; SOMOS NOSOTROS LOS POETAS EL ÚLTIMO BASTEÓN DE LA CORDURA QUE DEBERÁ LUCHAR POR QUE TAMPOCO SE EXTINGA EL HUNIVERSAL "HUMANIDAD" PROPIA DEL SER COLECTIVO.
No es la mala seña en historia, la que provoca el tun, tun, de la taquicardia, es por todo aquello que la historia no cuenta, cuando se es relatada lo que aruña; el vacío operando dentro el poema y metido en una casita de tejas.
Al final; la lucha que se nos presenta y para la cual hemos sido formados dentro de todo este futuro con cara de presente soltará el picaporte y la lucha necesariamente tendrá que ser, entre poetas y maquinas, tal cual.
La batalla final ¡el gran Armagedón! que nos espera será una batalla digital ¡la batalla final de las inteligencias!
No es, sino; en la plenitud del poema y la magia soñada jugando con la experiencia, en donde las máquinas dejan de llorar y somos nosotros los que necesitamos hacerlo.
Necesitamos hacer que las máquinas sean cada vez más humanas y que nosotros los humanos dejemos de comportarnos cada vez más de como máquinas, unos con otros, hasta hacerlas sentir el Tun, Tun, de la taquicardia.
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