- Si te acabas la vida, que tu espectáculo haya sido del bueno.
¡ Te estaré esperando allá en tu reino !
… darán las dos
¡ Detonará!
¡ No importará!
- Descalzos, juntos, bajo la luna sacra, vistiendo de plata y cantando a todo pulmón, con el embrujo de la noche.
- bailando al compás del efecto de las olas.
- Nos encaminamos todos inexorablemente, poco a poquito, sin nunca detenernos, hacia el nirvana.
ResponderEliminar¿cuantos microrelatos salen aquí?