De la niebla matinal el vacío bajo mis pies 
la superficie cantando a la ciudad dormida
onírica mente duermen tras el allá 
su vida sin sabor para no volver jamás
quien su sueño vive amanece para sí mismo
mas quienes desprecian sus propios sueños 
son solamente difuntos escuchando 
vagando por los camposantos del sistema
buscando una lápida con una inscripción
entre la niebla y la mañana sin encontrarla jamás

Comentarios

Entradas populares de este blog

Crowdstrike: el fallo global que llevó a Windows al colapso | Jorge Zamo...

TARDE